viernes, 4 de diciembre de 2009

Lo simple


Me detuve un instante para escuchar un sonido que no sabía exactamente de dónde venía. A ratos era intenso, luego bajito, bajito, como un susurro de primavera entre las flores silvestres más pequeñas. Cerré mis ojos para tener una dirección más exacta desde el lugar donde proviniera tal sonidito envolvente. Debo decir que sentarme en el sillón de fibra, a la hora que ya las estrellan comienzan a asomar sus brillantes ojitos, y el sol con su pañuelo de luces en alto, comienza a decir hasta mañana, mientras yo le brindo con mi mano un beso de despedida, es el momento más grato, de todo el día. Tengo música de fondo, no, esta vez no es Jazz, no está Diana Krall cantándome al oído, como me gusta que lo haga, ella es tan divina con su voz, y sus manos hacen magia en un piano que recita poemas musicales. Al menos es lo que me imagino, cuando la escucho. Pero ahora no, la música que siento es ese sonido que, aún no sé, si viene desde una casa vecina,o desde alguna de las habitaciones de mis hijos. No, la verdad es que música, música no es, es más bien un tamborcito lejano, que de pronto llega y se va alejando.


Estuve leyendo un libro por la tarde, que hablaba de disfrutar las simples cosas que la vida nos da, y me quedé con la sensación de que mi vida tiene mucho de esas diminutas cositas que hacen los momentos más gratos. Miro mis gatos, que casi voy pensando que son una extensión de mi sombra, donde estoy, ellos están a mi lado. Veo esas flores que sin haberlas plantado, salieron en ese rincón de mi patio, son como pequeñas margaritas rodeadas de tréboles, por más que he buscado no he encontrado uno de cuatro hojas, ¿los habrá? Nunca he visto uno. Que decir de ese beso que recibí esta mañana despertándome, suave y sereno en mis labios; O lo dulce que es cuando uno de mis hijos me sonríe, ufffff ni pisar la luna debe ser tan gratificante como para compararla, nada se puede comparar a la sonrisa de uno de los hijos. Nada!


Sigue el sonido, está vez va más fuerte, shhhhhhhhh silencio, me acerco, voy con mi mano buscando de dónde viene, creo que ya voy encontrando, creo que...creo...que


¡¡¡Es mí corazón que hoy está palpitando, lleno de emoción!!!!


Que bello atardecer he tenido, la música me ha llenado todo el espacio... hoy nuevamente Respiro.


Anouna

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Lindo leer esta parte de ti, o quizas de tu imaginación confrontada con la realidad, un verdadero gusto.

Besos.

Rosa dijo...

Hasta que uno no sienta la verdadera alegría de Navidad no existe. Todo lo demás es apariencia muchos adornos, porque no son los adornos, no es la nieve, no es el árbol, ni la chimenea.
La Navidad es el calor que vuelve al corazón de las personas, la generosidad de compartirla con otros y la esperanza de seguir adelante.

FELIZ NAVIDAD AMIGOS,
Un besito Rosa

Manolo Jiménez dijo...

En eso consiste la verdadera felicidad, en disfrutar de las pequeñas cosas que son enormes en realidad.

Cuando el primer rayo de sol te de en la cara da gracias por recibirlo, que nunca se te olvide.

Abrazos.

Anouna dijo...

JULIA R: Gracias por estar junto a mí. No es fácil ir hablando de una, pero es bueno que podamos dejar registro de nuestro paso, somos apenas un instante en la historia. Y como igual da un poco de pudor contar, va tomada de la forma sutil de lo fantástico, con un fondo muy real. Gracias otra vez.

Mi abrazo contigo amiga.

ROSA: ¡¡¡FELIZ NAVIDAD PARA TI!!! QUE NAZCA EN TÍ CADA VEZ LAS GANAS DE ADORAR A ESE NIÑO QUE NACIÓ PARA SALVACIÓN, Y EN MÍ TAMBIÉN SEA ESE SENTIR

MANOLO: No lo olvidaré, seré agradecida, te lo aseguro. Hablamos tantas veces de esas cosas simples, las estoy aprendiendo a disfrutar mucho más. Te agradezco las palabras.

Otro abrazo,

Anouna